Historia del turismo en la zona

 
En la decada de 1950, todo el area entro en una fase de crisis economica asociada al cierre del ferrocarril. Como forma de enfrentart esta situacion, se implementaron politicas de radicacion industrial y comenzo a desarrollarse el turismo. En 1970 se instalo la fabrica Aluar de fabricacion de aluminio, lo cual revirtio la crisis; con la fabrica se construyo el muelle mineralero, para la salida del mineral. Tambien se construyo la Central Hidroelectrica Futaleufu, en Trevelin a 500 kms al oeste de la cordillera, y el nuevo acueducto proveniente del rio chubut para el abastecimiento de agua potable. Con ello, la poblacion aumento considerablemente, y por lo tanto se vio facilitado el desarrollo de la actividad turistica.

Desde entonces, Península Valdés es un importante destino turístico, siendo visitado durante todo el año, además de ser lugar de destino de muchos viajes de estudio de alumnos secundarios de la Argentina.

El único asentamiento humano importante de esta península es el pueblo turístico de Puerto Pirámides, así denominado por las formaciones rocosas piramidales de su entorno, con unos 500 habitantes permanentes. Fuera de Puerto Pirámides, la escasa población se distribuye en unas 30 estancias ovejeras.

Esta península es uno de los destinos turísticos más importantes de la Argentina y convoca anualmente a millares de visitantes del país y el exterior. Gracias a las políticas de protección implantadas, la población de ballena franca austral se encuentra en lenta recuperación.

Cada invierno, estas ballenas pueden ser avistadas durante su época de apareamiento y parto. El avistamiento de ballenas se ha convertido en una de las actividades turísticas más importantes del país.

La Ballena Franca Austral comienza a llegar a la costa de la península a principios de mayo y se retiran los primeros días de diciembre.

Durante la temporada estival, el turismo se orienta principalmente al disfrute de las playas de Puerto Pirámides — las únicas habilitadas para bañistas — y el avistaje de fauna.

 

Durante el siglo XX, bien mencionado antes, existieron proyectos para el desarrollo de la zona, pero tales proyectos no contemplaban el impacto ambiental sobre el ecosistema y en la actualidad están abandonados.

El primero de ellos fue la propuesta de la refundación de la Antigua Guardia de San José ahora transformada en un gigantesco puerto ultramarino que abarcaría gran parte de las costas del Golfo San José, tal proyecto contemplaba la construcción de un canal de navegación que atravesando el Istmo Carlos Ameghino comunicaría al Golfo San José con el Golfo Nuevo.

Posteriormente se consideró la idea de crear otro canal (o un túnel) que también atravesaría el istmo en cuestión, aunque en este caso no para la navegación sino para – aprovechando la importante diferencia de los niveles de marea existentes entre el Golfo San José y el Golfo Nuevo – crear una gran usina eléctrica mareomotriz.