Características Naturales

La Quebrada de Humahuaca corresponde a una región de ambiente tectónico de faja plegada y corrida, cuya expresión morfológica se materializa en la presencia de depresiones estructurales y cordones montañosos. Se encuentra definida por el fondo de valle y eje principal del Río Grande, desde sus nacientes (al norte) hasta su confluencia con el Río León (al sur), y constituye un territorio privilegiado en cuanto a la diversidad y riqueza de su registro geológico. Sus grandes unidades geomorfológicas se corresponden con el Dominio de Cordillera Oriental y cuenta con materiales que van desde el Precámbrico hasta los depósitos más recientes del Cuaternario. Representa una unidad morfo-estructural, como prolongación meridional de la Cordillera Oriental y Central de Bolivia.

La Quebrada está limitada en su borde occidental por la Puna, sector que forma parte del Altiplano andino argentino-boliviano, con 3.800 m de altura media sobre el nivel del mar. El límite oriental es más difuso, observándose un paso transicional al conjunto de alineaciones montañosas menos elevadas, las Sierras Subandinas, que abarcan la transición al pedemonte andino definido por la llanura chaqueña.
Su estructura geológica se caracteriza por la existencia de bloques longitudinales elevados por fallas de alto ángulo que involucran al basamento. Responde a una tectónica de láminas cabalgantes con profundas superficies de despegue que dan lugar a un acortamiento de dirección E-O. Las rocas más antiguas de la región corresponden a grauvacas, pizarras, cuarcitas y esquistos precámbricas. El Paleozoico esta representado por el Cámbrico (areniscas y arcillas), mientras que el resto del paleozoico está constituido por capas de areniscas silicificadas, arcillas, grauvacas, conglomerados y calizas. El Mesozoico está caracterizado por areniscas cementadas y calizas, en tanto el Cenozoico se presenta poco consolidado y corresponde principalmente a areniscas y arcillas. Tales formaciones se presentan en fajas elevadas y alargadas NS, excepto el Cenozoico que se restringe a las zonas más bajas, coincidiendo con las líneas de drenaje más importantes.

El clima de la Quebrada de Humahuaca se clasifica como de montaña, árido, con carácter continental intenso. Las precipitaciones se distribuyen en el verano y los inviernos son muy secos. Se caracteriza por una acentuada amplitud térmica, tanto estacional como diaria. Durante el día, la tierra toma temperatura calentando el aire y durante la noche, se produce el enfriamiento del mismo. El régimen térmico está determinado en gran parte por el relieve y por la latitud y altitud.